En el primer año de Peñalosa se deterioraron varios indicadores de salud pública. La mortalidad infantil aumentó en Ciudad Bolívar, Bosa y Usme, otra prueba del fracaso de su política.
El concejal Manuel Sarmiento manifestó su preocupación por las cifras de salud pública entregadas por la Administración Distrital, según las cuales la tasa de mortalidad infantil aumentó en las 3 localidades más pobres de Bogotá, Ciudad Bolívar, Bosa y Usme. Estas cifras se suman al incremento de este indicador en toda la ciudad.
En materia de mortalidad infantil, el número de muertes prevenibles pasó de 99 en 2015 a 111 en 2016 en Ciudad Bolívar; en Bosa se registraron 77 casos en 2015 y 86 en 2016; igualmente sucedió en Usme, que en 2016 tuvo 7 casos más que en 2015. En cuanto a las tasas de mortalidad infantil por cada 1.000 nacidos vivos, las cifras son las siguientes: Ciudad Bolívar 9,6 en 2015 y 11,4 en 2016; en Bosa la tasa pasó de 7,4 en 2015 a 8,6 en 2016; mientras que en Usme la tasa aumentó 0,8 puntos en 2016 con respecto a 2015. “Es inaceptable que se sigan muriendo niños en la ciudad por enfermedades que son totalmente prevenibles y que las localidades más afectadas sean las de menores ingresos”, señaló Sarmiento.
Otros de los indicadores que se deterioraron en estas 3 localidades fueron la mortalidad en menores de 5 años y la mortalidad neonatal temprana, como se muestra en la tabla adjunta.
“No es de extrañar que empeoren los indicadores de salud pública en el Distrito. A Peñalosa solo le interesa la sostenibilidad financiera y el ahorrarse unos pesos en la red pública hospitalaria, aun cuando los principales afectados sean los más pobres”, concluyó el concejal Sarmiento.
Se adjunta tabla resumen.
