El IDU prorrogó por segunda vez el contrató ante el incumpliemiento del consultor encargado de hacer los estudios. A pesar de que los estudios están embolatados, Peñalosa se empeña en presionar a los vecinos que serán expropiados.
El pasado 26 de diciembre, el IDU prorrogó por dos meses el contrato de consultoría adjudicado a la firma INGETEC para adelantar los estudios y diseños de la troncal de Transmilenio por la carrera séptima. Según los informes de la interventoría, la prórroga se debe a los incumplimientos de la empresa contratista. Esta es la segunda vez que se extiende el plazo del contrato, la primera se hizo en noviembre del año pasado, cuando el contrató se prorrogó por un mes.
De acuerdo con el otro sí suscrito por el IDU, la prórroga se debe a una serie de incumplimientos de las obligaciones del consultor, particularmente en la entrega y aprobación de varios productos que hacen parte de la consultoría contratada para realizar los diseños de la troncal. El documento señala que «a la fecha no se cuentan con las aprobaciones correspondientes a los diferentes componentes de parte de la interventoría, ni de las entidades competentes ni empresas de servicios públicos». Y agrega: «así mismo podemos evidenciar que a la fecha la entidad no ha recibido NINGÚN producto y que tampoco existen aprobaciones por las ESP´s y/o Entidades Distritales».
El concejal Manuel Sarmiento repudió que el gobierno distrital presione a los vecinos de la Séptima que van a ser expropiados a pesar de que aún no existen los estudios definitivos y que los mismos están embolatados. «Los estudios de la séptima siguen embolatados y a pesar de ello Peñalosa muestra el proyecto como una realidad. Incluso, ya están bajando los avalúos catastrales de los vecinos para expropiar a la brava y por debajo del valor real de los predios (https://goo.gl/6tPcQ4), todo para imponer un proyecto que destruirá la vía más emblemática de Bogotá”, denunció el cabildante del Polo.
